El bienestar de los colaboradores ha dejado de ser un simple beneficio adicional para convertirse en una prioridad estratégica en la gestión del talento.
Según el informe Panorama del Bienestar en las Empresas 2025, elaborado por Wellhub, 88% de los trabajadores en México considera que el bienestar en el trabajo es tan importante como su salario.
El bienestar ya no es una opción, es una necesidad para atraer y retener talento en las empresas. De acuerdo con el informe, 90% de los colaboradores en México considera cambiar de empresa si su lugar de trabajo no prioriza su bienestar. Este fenómeno es aún más evidente entre las generaciones más jóvenes. 9 de cada 10 centennials y millennials considerarían trabajar solo en organizaciones que demuestren un compromiso real con la salud de sus empleados.
Además, un alto porcentaje de trabajadores, especialmente aquellos en el inicio de sus carreras, valoran el bienestar tanto como su salario. Esto implica que las empresas deben reevaluar sus estrategias de beneficios.
LOS PRINCIPALES DESAFÍOS
Aunque los datos indican que los empleados reconocen la importancia del bienestar, también señalan importantes desafíos que deben ser atendidos. El reporte destaca que 71% de los trabajadores en México no duerme las horas recomendadas. Además, 47% asegura que el estrés laboral afecta negativamente su salud emocional.
La gestión del sueño y el bienestar emocional son dos aspectos clave en los que muchas empresas fallan. Si bien se reconoce la relación directa entre estos factores y el rendimiento laboral, las iniciativas para mejorar estos aspectos a menudo se quedan cortas. Esto representa una oportunidad para que los departamentos de recursos humanos implementen programas más completos y efectivos que atiendan estas áreas críticas.
DESCONEXIÓN ENTRE LA PERCEPCIÓN Y LA REALIDAD
Uno de los hallazgos más preocupantes del informe es la desconexión entre la percepción que los colaboradores tienen de su bienestar y su situación real. 63% de los trabajadores en México afirma que su bienestar general es “bueno” o “muy bueno”. Sin embargo, las cifras revelan que solo 54% se siente en buena forma física y apenas 40% considera que su dieta es saludable.
Este desajuste indica que, aunque los empleados pueden sentirse bien en términos generales, aspectos cruciales como la alimentación, la actividad física y el descanso no están siendo abordados adecuadamente.
El bienestar no solo se trata de sentirse bien emocionalmente; también incluye el bienestar físico y la salud general. Las empresas que no aborden estos aspectos de manera integral corren el riesgo de enfrentar una disminución en la productividad y un aumento en los días de baja por enfermedad, lo que a largo plazo puede impactar negativamente en los resultados de la empresa.
EL IMPACTO DEL BIENESTAR EN LA COMPETITIVIDAD Y LA SATISFACCIÓN LABORAL
La correlación entre bienestar y rendimiento laboral es clara. El informe indica que 63% de los empleados con acceso a programas de bienestar afirma tener una buena salud emocional, comparado con solo 48% de aquellos que no cuentan con este tipo de iniciativas
Además, 60% de los colaboradores que participan en estos programas considera que su estado físico es óptimo, mientras que solo 45% de quienes no tienen acceso a programas de bienestar puede decir lo mismo.
Estas cifras no solo reflejan el impacto positivo de los programas de bienestar en la salud de los colaboradores, sino que también resaltan su influencia en el ambiente de trabajo y en la satisfacción general de los empleados. Según el estudio, 79% de los trabajadores que tienen acceso a estos programas perciben que su departamento de recursos humanos realmente se preocupa por ellos, una cifra que desciende a 45% entre aquellos que no cuentan con estos beneficios.
INVERTIR EN EL BIENESTAR GENERA RETORNOS
La implementación de programas de bienestar no es solo una medida para mejorar la salud de los empleados; también es una estrategia empresarial sólida. El informe señala que un personal más sano es más productivo, se toma menos días de baja por enfermedad y es menos propenso a sufrir de agotamiento o “burnout”. Además, los programas de bienestar ayudan a reducir la rotación de personal, lo que a su vez disminuye los costos asociados a la contratación y capacitación de nuevos empleados.
El retorno de inversión (ROI) de estos programas es claro. 84% de los empleados que tienen acceso a programas de bienestar considera que su compensación es adecuada, en comparación con 61% que no cuentan con estos beneficios.
Además, los colaboradores que participan en programas de bienestar son más propensos a sentirse comprometidos con la empresa. Esto mejora la retención y disminuye los costos operativos asociados al reemplazo de empleados.