Deja de hacer estos 3 tipos de posteos en LinkedIn

Con más de 900 millones de usuarios en todo el mundo, LinkedIn parece la mina de oro definitiva para el networking profesional y el crecimiento laboral. Pero encontrar la combinación adecuada entre experiencia auténtica, un toque personal y participación de la audiencia puede parecer más complicado de lo que vale la pena. Sí, es crucial saber cómo aumentar el engagement, pero también es importante entender qué tipos de posteos pueden dañar tu reputación y sabotear tus esfuerzos por ser visto como un experto. Aquí hay tres tipos de posts que es mejor evitar.

LOS POSTEOS QUE PERSIGUEN AL ALGORITMO DE LINKEDIN

El algoritmo de LinkedIn cambia constantemente, lo que influye en los “me gusta”, las vistas y las interacciones sociales que reciben tus posteos de clientes potenciales, empleadores y tu red. A diferencia de plataformas como Instagram y TikTok –que prosperan con contenido de moda y alta interacción– LinkedIn en realidad penaliza las publicaciones que parecen estar manipulando el sistema.

En su lugar, la mejor manera de destacar es enfocarte en la credibilidad, la experiencia y las conversaciones significativas dentro de tu industria, siempre teniendo en cuenta las necesidades de tus clientes. Cuando persigues un algoritmo cambiante, corres el riesgo de publicar contenido polémico o “hot takes” que buscan reacciones rápidas en lugar de un engagement reflexivo.

Para no caer en la trampa de perseguir el engagement, crea una lista de temas relevantes e interesantes que surjan de conversaciones con clientes y colegas. Esto te permitirá mantener un equilibrio entre relevancia y profesionalismo en los posteos que compartas. De hecho, muchos líderes empresariales utilizan LinkedIn para fortalecer la presencia de sus negocios y marcas. Mantener la coherencia con tu identidad y objetivos profesionales es un mejor uso de la plataforma que simplemente esperar que los números de interacción te ayuden a ganar credibilidad.

¿Te preguntas cómo generar engagement sin depender de los cambios del algoritmo? La respuesta es simple: mantente auténtico y crea contenido que genere conversaciones significativas con tu audiencia objetivo. De esta manera, atraerás a las personas correctas, aquellas genuinamente interesadas en ti y en tu trabajo.

LOS POSTEOS QUE TE ESCRIBIÓ LA IA

En un mundo fascinado por las capacidades de la inteligencia artificial, la idea de dejar que una IA redacte tu contenido en LinkedIn es tentadora, sobre todo cuando tienes poco tiempo. Sin embargo, esta decisión puede traer más contras que pros.

La mayoría del contenido en LinkedIn es publicado por profesionales individuales, no por perfiles corporativos, lo que significa que cada publicación debe reflejar tu experiencia única. La audiencia de LinkedIn busca conectar con otros profesionales para generar oportunidades de negocio, colaboraciones y referencias.

Detrás de cada uno de estos objetivos está el deseo de conectar con otras personas que puedan entender a los clientes y construir relaciones laborales basadas en la confianza. Nada perjudica más esa confianza que el contenido inauténtico o ignorar el criterio necesario para garantizar que tu contenido sea adecuado y coherente, no solo con tu voz, sino también con la de tu empresa.

Si bien las herramientas de inteligencia artificial en constante evolución pueden ayudar a generar ideas, iniciar una publicación o estructurar el contenido, la participación humana en la redacción y en la creación de enfoques adecuados para compartir en la plataforma no puede ser delegada completamente a estas herramientas inteligentes. La IA carece del juicio necesario para comprender cómo será recibido el contenido por los usuarios y para predecir el nivel de interacción y las conversaciones que podrían surgir en una plataforma de redes sociales.

Al publicar sin esta visión y sin un entendimiento profundo del tema, los comentarios en un posteo pueden desviarse de la dirección que esperabas para generar engagement. Este cambio en la discusión puede debilitar tus objetivos y afectar la percepción de tu experiencia profesional, así como la imagen que deseas construir cuando intentas establecer relaciones laborales sólidas.

¿Qué hacer si la IA no puede ser tu redactor fantasma? Pídele una lista de subtemas a partir de tu idea inicial, solicita ayuda para redactar una oración compleja o consulta a un colega o cliente para obtener su opinión, ya que ellos sí tienen el criterio que le falta a la IA.

LOS POSTEOS FREGADERO

¿Alguna vez has visto una publicación que intenta meter todo y que solo le faltó el fregadero de la cocina? Por lo general, es una queja contra algún “enemigo” del momento –puede ser contra las grandes corporaciones, ciertos estilos de trabajo o diferencias generacionales– y está llena de puntos aleatorios y poco relevantes.

El problema con este enfoque de “mételo todo” es que las afirmaciones exageradas y sin fundamentos o conocimientos expertos pueden salirte caro. Puede que no lo notes de inmediato, pero ese comentario duro podría hacerte perder un cliente o llevar a que te descarten para el trabajo de tus sueños.

Entonces, ¿qué deberías publicar en su lugar? Elige un solo ángulo sobre un tema relevante –por ejemplo, el equilibrio entre la vida laboral y personal– y comparte una perspectiva bien pensada que fomente una conversación genuina. En lugar de establecer límites rígidos de “nosotros contra ellos”, habla sobre soluciones prácticas para crear un entorno laboral más saludable.

No lo olvides, el verdadero objetivo en LinkedIn no es acumular millones de vistas, sino construir una comunidad comprometida que valore tu voz y conocimientos únicos. Eso es lo que realmente importa a largo plazo.