
Gilbert Houngbo, director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), advirtió en la cumbre de IA en París que la automatización del trabajo derivada de esta tecnología impactará más a las mujeres, profundizando la desigualdad de género.
La IA, y en particular la IA generativa, ya tiene un impacto en el mundo del trabajo y “sabemos que la mayoría de los empleos que serán automatizados serán empleos en los que tenemos una mayoría de mujeres trabajando”, dijo Houngbo.
Estas categorías de empleos que “serán destruidos aumentarán, por lo tanto, la brecha entre hombres y mujeres. Es algo que debemos tener presente”, continuó. “Si las empresas pueden reemplazar a los trabajadores por robots, es muy probable que lo hagan”, también predijo Houngbo.
El campo de la IA en sí ya es uno que enfrenta una alarmante brecha de género, con muy pocas mujeres trabajando en el sector de la computación y la codificación.
Según cifras de la Unesco, las mujeres apenas representan 12% de los investigadores en IA y 6% de los programadores a nivel mundial. A su vez, 88% de los algoritmos son creados por hombres, de acuerdo con Hélène Deckx Van Ruys, corresponsable del grupo mujeres e IA en el Laboratorio de la Igualdad francés.
El impacto de IA en la pérdida de empleos
Por el momento, la IA crea más empleos de los que destruye, pero Houngbo dice que estos podrían ser “menos bien remunerados y menos bien protegidos”.
En total, la IA afectará al 2.3% de los puestos de trabajo a nivel mundial; es decir, alrededor de 75 millones de empleos, según cálculos de la OIT.
“Las personas que escriben para la televisión, las personas que trabajan en centros de llamadas, todas estas personas están extremadamente preocupadas porque la IA reducirá su autonomía o las reemplazará por completo”, coincidió Christy Hoffman, secretaria general de la federación sindical internacional UNI Global Union.
Para que estos trabajadores no se queden al margen de estos cambios, se necesita “un verdadero apoyo a través de un sistema de protección social”, pero también “formación continua” de los empleados, abogó Gilbert Houngbo.
“En realidad no es la inteligencia artificial la que nos quitará nuestro empleo, sino la falta de preparación para desarrollar nuevas habilidades en el contexto de la IA lo que lo hará”, señaló.