
Una de las promesas de campaña que brindó gran impulso a la candidatura de Donald Trump tiene que ver con la deportación de inmigrantes ilegales y fronteras más seguras. Mediante amenazas arancelarias, Trump consiguió la cooperación de sus vecinos, Canadá y México, en el tema de asegurar fronteras. Esto, aunado a la política de deportación estadounidense conocida como Título 42 y las políticas de Quédate en México y México te abraza, ha provocado que miles de migrantes hayan decidido permanecer en tierras aztecas en lugar de cruzar la frontera.
De hecho, en el primer de la administración del magnate 37,660 personas fueron deportadas por Estados Unidos (un número menor a los deportados al mes por Biden en el último año de su administración). Por otro lado, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), en diciembre de 2024 se registraron 78,975 solicitudes de reconocimiento de la condición de refugiado, principalmente de Honduras, Cuba y Haití.
Hoy por hoy, el país ya no solo envía migrantes: es una vía de tránsito para migrar, así como un destino para quienes buscan una vida mejor o llegan bajo otros programas humanitarios.
Sin embargo, ¿cómo mantener a todas estas personas? ¿Cómo evitar una crisis humanitaria aún mayor? Ante este panorama, Ayuda en Acción de México refuerza su proyecto “Promoción de la inserción laboral con perspectiva de Derechos Humanos de mujeres refugiadas en México”.
La reinserción laboral, la clave de la autonomía
Dos de las causas macro de la migración son la economía y la sociedad, las cuales tienen un gran efecto en mujeres y hombres del colectivo LGBTIQ+. Partiendo de que migrar es un derecho, Ayuda en Acción de México busca fortalecer sus habilidades sociales y laborales con el objetivo de que se vuelvan económicamente activos de manera formal en el país.
Esto se decidió debido a que 89% de las personas que pidieron no tenían ninguna fuente de ingresos, y casi 41% viaja con menores.
Actualmente la organización opera en Monterrey, San Luis Potosí, Ciudad de México y Tenosique, Tabasco, y su proyecto ha ayudado a que 48 mujeres refugiadas se inserten en el mercado laboral. Asimismo, ha registrado 2,245 atenciones psicosociales, legales, médicas, académicas y laborales, así como acompañamientos emocionales y de trabajo social.
Esto incluye casas de transición, asesorías en trámites bancarios, médicos y tributarios, la formación en herramientas de empleabilidad, habilidades blandas y derechos humanos. Además, se considera la realidad de las mujeres que viajan con menores, brindándoles acceso a actividades lúdicas y apoyo psicológico infantil.
Ante la realidad de que cada vez son más los migrantes que terminarán, por gusto o política, en México, es indispensable crear soluciones a problemas a futuro, y esto involucra facilitar su integración socioeconómica mediante acceso a empleo, educación y vivienda. Los proyectos de inserción laboral pueden reducir la vulnerabilidad de esta población y convertirlos en una fuerza productiva para México.