
Durante años, Alex Shevchenko trabajó en el sector de préstamos en Estados Unidos, ayudando a las empresas a obtener financiamiento para crecer. Sin embargo, observó un patrón preocupante: muchas empresas mexicanas encontraban más fácil acceder a crédito a través de sus subsidiarias en Estados Unidos que en su propio país.
“Veía negocios bien gestionados en México luchando por obtener financiamiento localmente, a pesar de tener finanzas sólidas. Mientras tanto, sus subsidiarias en Estados Unidos, mucho más pequeñas, accedían al crédito sin problema. No tenía sentido”, recuerda Alex.
Esta observación despertó su interés. México alberga emprendedores ambiciosos y empresas en crecimiento, pero muchas carecían del respaldo financiero necesario para expandirse. Así, Alex llegó a una conclusión clave: el sistema de crédito en México estaba desactualizado y presentaba obstáculos innecesarios para los negocios listos para escalar.
Un momento decisivo en Tulum
La conexión de Alex con México se profundizó en un viaje transformador a Tulum. Mientras se preparaba para proponerle matrimonio a su futura esposa, conoció a varios emprendedores locales. Sus historias revelaron un desafío común: a pesar de dirigir negocios rentables y consolidados, tenían dificultades para acceder a financiamiento.
“Un restaurante había prosperado durante cinco años, otro era un pilar en la comunidad desde hacía más de una década y un minorista operaba con éxito varias sucursales. No eran negocios en crisis; eran sólidos, rentables y esenciales para sus comunidades. Sin embargo, todos enfrentaban el mismo obstáculo: la falta de opciones de financiamiento”, explica Alex.
Esta experiencia reforzó lo que había presenciado a lo largo de su carrera. En el mismo lugar donde hizo un compromiso personal para toda la vida, también encontró su propósito profesional. Salió de Tulum decidido a transformar el panorama financiero de México.
Modernizando el financiamiento empresarial en México
El problema no era el riesgo: las empresas mexicanas tenían finanzas sólidas, demanda creciente y modelos de negocio robustos. El verdadero desafío era un sistema de crédito obsoleto que hacía que el financiamiento fuera lento, complicado y, a menudo, inaccesible.
Mientras tanto, la tecnología financiera estaba revolucionando los mercados globales, haciendo que los préstamos fueran más ágiles, eficientes y basados en datos. Si los emprendedores en México tuvieran acceso a soluciones financieras modernas, podrían desbloquear su máximo potencial sin barreras innecesarias.
El nacimiento de Qredio: financiamiento diseñado para emprendedores
Shevchenko fundó Qredio para cerrar esta brecha, ofreciendo un enfoque de financiamiento empresarial ágil y transparente. A diferencia de los bancos tradicionales, Qredio prioriza la rapidez, la flexibilidad y la evaluación en tiempo real del desempeño de los negocios en lugar de depender de modelos de crédito rígidos. Gracias a la automatización y el análisis de datos, evalúa a las empresas en función de su salud financiera actual y no de sistemas de puntuación obsoletos.
Más allá de proporcionar capital, Qredio se construyó sobre una comprensión profunda de cómo operan los negocios en México. Los emprendedores mexicanos son resilientes, innovadores y estratégicos. No les falta visión ni ejecución, sino un sistema financiero que avance a su ritmo.
Impulsando el futuro de México
La misión de Alex con Qredio va más allá de los negocios. Su experiencia directa con emprendedores –personas que ponen su pasión en construir algo significativo– solidificó su compromiso de apoyar el crecimiento económico de México.
“México tiene un espíritu emprendedor increíble. El país no carece de buenos negocios; carece de instituciones financieras que se muevan a la velocidad de sus emprendedores. Qredio existe para cambiar eso”.
Hoy, Qredio empodera a empresas en todo México con soluciones de financiamiento modernas y adaptadas a sus necesidades. Lo que comenzó como una observación se ha convertido en una misión: garantizar que cada emprendedor mexicano tenga acceso a las herramientas financieras necesarias para triunfar.
“Los emprendedores mexicanos están impulsando el futuro de la economía. Merecen soluciones de financiamiento que estén a la altura de su ambición”.