
No, este artículo no fue escrito con ChatGPT. ¿Sabes cómo se nota? Porque tiene un toque de personalidad (la mía), y aunque trata sobre Inteligencia Artificial (IA) —posiblemente uno de los temas más aburridos del mundo, en mi opinión—, no parece generado por computadora. ¡Solo yo, de pie frente a mi carísimo escritorio, escribiendo en mi laptop!
Lo que nos lleva al motivo de este artículo: un nuevo estudio sobre IA.
Investigadores de la Universidad de Cornell analizaron cómo los modelos de IA centrados en Occidente ofrecen sugerencias de escritura a usuarios de diferentes orígenes culturales. El estudio, titulado “Las sugerencias de IA homogeneizan la escritura hacia estilos occidentales y reducen los matices culturales“, incluyó a 118 participantes de India y Estados Unidos. Descubrió que, cuando los indios y los estadounidenses utilizaban la asistencia de escritura de ChatGPT y otros modelos de IA, a menudo lo hacían en detrimento de los indios del grupo.
¿Por qué?, te preguntarás. Aunque las herramientas ayudaron a ambos grupos a escribir más rápido, los escritores indios tuvieron que corregir constantemente las sugerencias de la IA, lo que resultó en un menor aumento de productividad. Una razón es que herramientas de IA como ChatGPT son desarrolladas principalmente por empresas tecnológicas estadounidenses, que utilizan modelos lingüísticos extensos que no incorporan todos los matices lingüísticos del 85% de la población mundial, que vive en el Sur Global y utiliza herramientas de escritura con IA. —El Sur Global se define como aquellos países ubicados principalmente en el hemisferio sur, a menudo considerados en desarrollo o menos desarrollados que sus homólogos del norte de África, Asia y Latinoamérica—.
ChatGPT dirige todo a la cultura estadounidense
Los investigadores del estudio pidieron a ambos grupos que escribieran sobre temas culturales como la gastronomía y las festividades. La mitad utilizó un asistente de escritura con inteligencia artificial que ofrecía sugerencias de autocompletado. Las muestras de escritura mostraron que los participantes indios conservaron 25% de las sugerencias, mientras que los estadounidenses solo 19%, pero también descubrieron que los escritores indios modificaron significativamente más dichas sugerencias, lo que las hizo menos útiles.
Por ejemplo, cuando algunos indios escribieron sobre comida, una sugerencia común fue la pizza. O cuando escribieron sobre festividades, la herramienta de IA sugirió la Navidad.
En resumen, este estudio demuestra que la IA no es todo lo buena que parece y que beneficia a algunos usuarios más que a otros. “Este es uno de los primeros estudios, si no el primero, que demuestra que el uso de la IA en la escritura podría generar estereotipos culturales y homogeneización lingüística”, según uno de los autores del estudio, Aditya Vashistha, profesor adjunto de Ciencias de la Información. “Las personas empiezan a escribir de forma similar, y eso no es lo que queremos. Una de las cosas hermosas del mundo es la diversidad que tenemos”.
El autor principal del estudio, Dhruv Agarwal, estudiante de doctorado en el campo de la ciencia de la información, dijo que si bien la tecnología aporta mucho valor a la vida de las personas, “para que ese valor sea equitativo y para que estos productos tengan éxito en estos mercados, las empresas tecnológicas deben centrarse en los aspectos culturales, en lugar de solo en los aspectos lingüísticos”.