3 señales de que tienes más riesgo de burnout que los demás en el trabajo

El burnout es un problema generalizado que puede ser perjudicial para las personas y costoso para las empresas. Como Fast Company informó anteriormente, 82% de los trabajadores se sienten en riesgo de sufrirlo, lo que podría costar a las empresas un promedio de 21,000 dólares al año en pérdida de productividad.

Y aunque abundan los consejos sobre cómo prevenir el síndrome de burnout, la prevención no siempre es equitativa. Aquí hay algunas situaciones que pueden hacerte más propenso a este agotamiento que otras:

1. Si estás en el entorno laboral equivocado eres más propenso al burnout

Kandi Wiens, investigadora de la Universidad de Pensilvania y directora de la maestría en educación médica, dice que algunas personas pueden tener mayor riesgo de sufrir agotamiento que otras, especialmente aquellas que trabajan en entornos que no son compatibles con su personalidad o temperamento.

Wiens, autor de Burnout Immunity: How Emotional Intelligence Can Help You Build Resilience and Heal Relationships at Work (Inmunidad al agotamiento: cómo la inteligencia emocional puede ayudarle a desarrollar resiliencia y sanar las relaciones en el trabajo), dice que el agotamiento, especialmente en el lugar de trabajo, “en última instancia se reduce a una falta de alineación, o a veces denominada como un desajuste, entre la personalidad o el temperamento de alguien y el entorno en el que se encuentra”.

Así que, si eres extrovertido y trabajaste a distancia durante la pandemia de covid-19, esto podría haberte provocado agotamiento, mientras que tus compañeros más introvertidos podrían haber prosperado. Si eres curioso y de mente abierta, y tu lugar de trabajo prohíbe ese tipo de investigación o experimentación, podrías agotarte más rápido.

Algunas señales de que podrías estar en el entorno laboral equivocado incluyen sentir resistencia al estilo de trabajo o las ideas de la empresa. Wiens sugiere que las personas “presten atención a esa resistencia y se autoevalúen”. Practica expresar tus preocupaciones sobre esa resistencia con alguien de verdadera confianza. “¿Cómo se vería eso y cómo puedes hacerlo de una manera saludable?”, pregunta.

2. Si se te da eso de la adulación

Aquellos que se esfuerzan constantemente por complacer a los demás en el lugar de trabajo y no son capaces de establecer límites saludables son “aduladores”, dice la psicóloga clínica Ingrid Clayton, autora de Fawning: Why the Need to Please Makes Us Lose Ourselves—and How to Find Our Way Back. Este afán crónico de complacer a los demás es una “respuesta híbrida al trauma”, dice Clayton, señalando que es una alternativa a las respuestas tradicionales de lucha, huida o congelación. “Es esta hipersintonía y gestión de otras personas: apaciguar a otras personas de una manera hiperactiva”, dice. “Pero también es hipoactivación, donde hay una desconexión de nosotros mismos, por lo que no sabemos que estamos adulando”.

En su libro, Clayton cita el ejemplo de un socio de un bufete de abogados con estudios en Harvard que presentaba síntomas de agotamiento. Trabajando con él, le ayudó a comprender que la validación externa que buscaba, así como su incapacidad para establecer límites , lo estaban llevando al agotamiento. Esta búsqueda excesiva de complacer a los demás puede llevarnos a trabajar en exceso y asumir demasiadas responsabilidades, lo que finalmente conduce al agotamiento.

“Nuestro valor está ligado a estos indicadores externos más que a una conexión con nosotros mismos”, explica Clayton. “Por lo tanto, el agotamiento no se trata solo del rendimiento —el agotamiento por excederse—, sino de la pérdida de autonomía, autenticidad y de saber quiénes somos. Es un modo de supervivencia, y no estamos hechos para vivir así las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Tenemos que ceder en algo”.

3. Si careces de autoconciencia y habilidades de autodefensa

Cuando enfrentas desafíos en el trabajo, ya sea porque la cultura no se adapta a tu personalidad y rasgos, o porque estás cayendo en un comportamiento complaciente, defenderte es fundamental para protegerte del agotamiento. Sin embargo, Wiens afirma que la autoconciencia es esencial para comprender los problemas que causan fricción con tu personalidad o temperamento y poder abordarlos.

Una vez que identifiques el problema, puedes empezar a tomar medidas para mitigarlo. Por ejemplo, si eres aislado y extrovertido, puedes diseñar deliberadamente otras maneras de conseguir la interacción que necesitas. Si tu creatividad se ve limitada, quizás puedas encontrar otras salidas.

Wiens sugiere pensarlo así: “¿Qué hay en el entorno que no coincide o no se alinea con lo que se desencadena en mí? ¿Y qué puedo hacer para cambiarlo o cambiar mi forma de pensar al respecto?”. Señala que las personas que carecen de autoconciencia y de la capacidad de analizar sus sentimientos se enfrentan a un obstáculo fundamental para abordar los problemas que podrían conducir al agotamiento.

Clayton señala que si no eres capaz de defenderte por ti mismo —lo que incluye pedir lo que necesitas y establecer límites cuando sea necesario—, puedes ser más propenso al agotamiento.

Lucha contra el agotamiento

La buena noticia, dice Clayton, es que establecer límites se puede practicar y “desarrollar como un músculo”. Empieza por pedir lo que necesitas cuando hay poco en juego, por ejemplo, al pedir en un restaurante, para adquirir el hábito. “Algunas personas pueden tomarlo a broma si no tienen esta experiencia, pero es muy real que si no tienes la experiencia de hablar abiertamente o establecer un límite donde te sientas seguro y hayas tenido éxito, tienes que empezar a desarrollar esa experiencia”, dice.

Si bien varios factores pueden contribuir al síndrome de burnout, estos tres problemas pueden acelerarlo. Sin embargo, mediante la concientización y la práctica para mitigar estos factores, los trabajadores pueden encontrar cierta protección contra esta enfermedad generalizada.