
Linda Yaccarino anunció su renuncia como directora ejecutiva de X, antes Twitter, tras dos años al frente de la empresa propiedad de Elon Musk. En un comunicado publicado en la propia plataforma, afirmó que había decidido dejar el cargo tras lo que describió como “dos años increíbles” liderando la compañía durante una gran transformación.
No se dio ninguna razón oficial para su salida, aunque la renuncia se produjo en medio de una polémica relacionada con Grok, el chatbot de inteligencia artificial. Este fue criticado por publicar comentarios antisemitas que elogiaban a Adolf Hitler y por insultar al islam en publicaciones separadas en X.
En su comunicado, Yaccarino elogió la “recuperación empresarial histórica” lograda por el equipo de X y sugirió que la plataforma entraba en “una nueva etapa” junto a xAI, la empresa de inteligencia artificial de Musk. “Ahora, lo mejor está por venir mientras X entra en una nueva etapa junto a @xai”.
En marzo, xAI adquirió X en una operación en acciones que valoró la red social en 33 mil millones de dólares, convirtiéndola en una subsidiaria de la compañía de IA de Musk.
“X es verdaderamente una plaza pública digital para todas las voces y la señal cultural más poderosa del mundo”, escribió Yaccarino, añadiendo que “estaré animándolos mientras continúan cambiando el mundo”.
El paso de Yaccarino por X
Yaccarino —una exejecutiva de publicidad de NBCUniversal— asumió como CEO de X en junio de 2023, reemplazando a Musk, quien había ocupado el cargo desde que adquirió Twitter por 44,000 millones de dólares en octubre de 2022.
Su nombramiento ocurrió mientras Musk buscaba enfocarse en el desarrollo de productos y delegar la gestión a una líder con experiencia en medios para recuperar la confianza de los anunciantes. La trayectoria de Yaccarino en publicidad se consideraba clave para restablecer relaciones comerciales.
Durante su gestión, X introdujo nuevas funciones como Community Notes, un sistema de verificación colaborativa, y anunció planes para X Money, un servicio financiero como parte de la visión de Musk de transformar la plataforma en una “aplicación para todo”.
Este periodo también coincidió con el respaldo financiero de Musk a Donald Trump, lo que llevó al multimillonario nacido en Sudáfrica a convertirse en un estrecho asesor presidencial, antes de un reciente distanciamiento entre ambos.
Desde la adquisición por parte de Musk, la empresa ha enfrentado importantes desafíos, incluidos el éxodo de anunciantes y preocupaciones sobre las políticas de moderación de contenido, a pesar de los esfuerzos.