En un entorno donde la tecnología avanza rápidamente y redefine el mundo empresarial, la conexión humana y la empatía se han convertido en pilares esenciales para el liderazgo. Según TalentSmart, las empresas que priorizan la inteligencia emocional en su cultura organizacional experimentan un aumento de 25% en productividad y 30% en retención de talento.
Si bien la digitalización permite automatizar procesos y optimizar tareas, también crea un ambiente en el que las relaciones interpersonales pueden desvanecerse entre pantallas y algoritmos.
“Fomentar la confianza y la lealtad, no sólo entre los líderes, sino en todo el equipo, se traduce en una mayor motivación y compromiso, generando un ambiente más amable y cómodo para relacionarse”, comentó Rui Rocheta, Chief Regional Officer SW Europe & LatAm de Gi Group Holding, una empresa italiana que recientemente ha establecido presencia en México. Añadió que “la conexión humana que se genera entre estos dos grupos, empleadores y empleados, puede ayudar a comprender y entender las necesidades de sus colaboradores; una vez entendiendo esto, la productividad aumenta, pues, la empatía hacia otros contribuye a un mejor bienestar y salud mental.”
Rocheta señala tres maneras de promover la conexión humana y la empatía desde el liderazgo para mejorar la comunicación entre equipos y avanzar hacia un modelo de trabajo más estratégico y adaptado a las necesidades individuales.
1. Aprovecha las herramientas digitales (sin excesos)
De acuerdo con un estudio de Capterra sobre administración de proyectos en México, 38% de las empresas en el país ya utiliza inteligencia artificial en sus procesos. Las herramientas digitales pueden facilitar las relaciones a distancia mediante videollamadas, plataformas de colaboración y espacios virtuales informales, fortaleciendo el vínculo y la cohesión del equipo.
Sin embargo, el uso excesivo de estas herramientas puede provocar agotamiento, sensación de vigilancia continua e incluso hostigamiento. Para evitarlo, es clave respetar los horarios de trabajo, feriados y eventos personales importantes, como cumpleaños o situaciones difíciles, lo cual promueve una comunicación empática y no invasiva.
2. Explora nuevas estrategias de colaboración
Según una encuesta de EY Work Reimagined, 84% de los empleados en México prefiere un esquema de trabajo híbrido, especialmente el remoto. Algunas empresas han adoptado modelos de reuniones programadas y tareas organizadas por KPI, permitiendo a los empleados avanzar hacia metas comunes de manera autónoma.
Otras empresas optan por encuentros presenciales algunos días de la semana para alinear tareas y fomentar la convivencia en un ambiente distinto. Algunas ajustan los horarios laborales para que los empleados tengan más tiempo personal. Probar nuevas formas de trabajo que respondan al estilo de vida de los equipos fortalece tanto el ámbito personal como el profesional.
3. Usa la tecnología con empatía
Aunque la tecnología es útil para tareas repetitivas y análisis de datos, la conexión emocional es esencial en conversaciones difíciles, evaluaciones de desempeño y diálogos personales, los cuales deben tratarse de forma directa, ya sea en persona o por videollamada. Según el Índice de Relaciones Laborales de HP, 76% de los empleados en México cree que las empresas deben fomentar la expresión de emociones.
Si bien algunas conversaciones pueden resolverse mediante mensajes o correos, en ciertas ocasiones es más empático hacer una llamada o agendar una reunión. Esto también aplica a momentos de celebración y reconocimiento, que se valoran más en interacciones humanas.
“Las herramientas digitales facilitan la comunicación y la colaboración, sin embargo, no pueden sustituir la interacción personal y la comprensión de las emociones de cada individuo”, señaló Christian Rico, Country Manager de Gi Group Holding en México. Añadió que “En un país como México, donde el sentido de comunidad y la cercanía interpersonal son valores clave en el entorno laboral, es esencial que los altos mandos se involucren activamente para fomentar un ambiente en el que la tecnología potencie, en lugar de limitar, la conexión emocional. Esto requiere invertir tiempo en conversaciones genuinas, reconocer los logros individuales y celebrar los éxitos del equipo de manera auténtica”.