
El mes pasado, la plataforma de redes sociales de Elon Musk, X, anunció el lanzamiento de un servicio de “billetera digital”. Los usuarios podrían transferir dinero desde sus cuentas bancarias a una billetera en X, llevando a la plataforma un paso más cerca de su ansiada transformación en la “aplicación para todo”. Sin embargo, el anuncio se recibió en Bluesky y X con una avalancha de bromas sobre un concepto conocido por muchos el inspector de billeteras. “Felicidades a Elon por su esperado ingreso al negocio de inspección de billeteras”, escribió Edward Niedermeyer, autor de un libro sobre Tesla. Y eso fue antes de que el Departamento de Eficiencia Gubernamental de Musk comenzara a hurgar en el tesoro nacional.
Aún es temprano, pero el inspector de billeteras ya es el principal candidato a convertirse en el meme definitorio de 2025.
El origen de este meme se remonta a un episodio de Los Simpson de 1993 titulado “Homero va a la Universidad”, escrito por Conan O’Brien. En la escena clave, Homero se siente culpable tras provocar que tres nerds fueran expulsados de la universidad. Uno de ellos intenta tranquilizarlo, asegurando que pueden arreglárselas solos. Justo en ese momento, se les acerca un ladrón que se presenta como “el inspector de billeteras” y extiende la mano para solicitar sus pertenencias. Sin dudarlo, el grupo le entrega sus billeteras, dejando al ladrón atónito al ver que su plan, evidentemente absurdo, funcionó.
El meme de 2025
La escena es graciosa por múltiples razones. Primero, por la idea de un ladrón tan perezoso que simplemente se presenta como inspector de billeteras esperando que le crean. Luego, por la credulidad de un grupo de personas tan ingenuas que ni siquiera cuestionan la solicitud. Pero lo más divertido quizás sea el rol de Homero, quien observa toda la situación y, con impotencia, dice: “Ese no es el inspector de billeteras”.
Que este concepto pueda aplicarse a tres tipos de comportamientos diferentes explica por qué se filtró en el lenguaje cultural desde hace años. Sin embargo, la combinación de engaños evidentes y una credulidad alarmante en los últimos meses ha hecho que el meme cobre especial relevancia en 2025. Es la frase perfecta para describir una época en la que la mera apariencia de legitimidad y la falta de escrúpulos pueden llevar a alguien a cualquier parte.
La experiencia cotidiana en 2025 —con instituciones derrumbándose, un desorden que ya no está “a las puertas” sino dentro del sistema, y con cualquier escenario catastrófico pareciendo plausible— ha hecho que muchas personas adopten una postura de desconfianza total. Para quienes han asumido esta mentalidad, cualquier persona que aún tenga fe en algo —las leyes, la seguridad pública, la decencia básica— es vista como un ingenuo.
Cuando un jurista sigue creyendo que la Constitución es inviolable, incluso después de ver a Musk y su equipo desafiarla abiertamente cada día, está listo para el inspector de billeteras.
Cuando un senador republicano que ha vivido la última década aún se sorprende de que Donald Trump no haya cumplido su palabra, ha llegado la hora de la inspección.
Y cuando DraftKings ofrece a sus usuarios con problemas de juego una suscripción premium con “mayores probabilidades de ganar”, esa billetera ya está perdida.
¿Es Musk el “inspector de billeteras”?
Las acusaciones de “inspección de billeteras” abundan en el mundo tecnológico. Se usan para describir a quienes fueron víctimas de las últimas estafas con memecoins promovidas por la Hawk Tuah Girl o el propio Presidente, así como a cualquiera que haya invertido en NFTs. También se emplean para referirse a cómo el gobierno de Estados Unidos entrega miles de millones a empresas de inteligencia artificial con la ingenua creencia de que una compañía china nunca los superará. Y, por supuesto, la frase se hizo inevitable cuando se descubrió que uno de los anunciantes menos conocidos de X era, irónicamente, una empresa que ofrecía inspecciones de billeteras reales.
El meme alcanzó su punto máximo cuando X anunció su servicio de billetera digital y, poco después, el equipo de Musk obtuvo acceso al Tesoro de Estados Unidos. Ahora, según reportes, el grupo detrás de DOGE tiene a su disposición datos sobre números de seguridad social e información bancaria, lo que en efecto los convierte en los inspectores de billeteras de América, mientras que los principales funcionarios del país simplemente les entregan el dinero sin cuestionarlo.
El meme del inspector de billeteras es devastador porque no solo señala a quienes confían ciegamente en afirmaciones evidentemente falsas, sino también a quienes hacen esas afirmaciones y a los observadores, al estilo de Homero, que parecen incapaces de entender lo que está sucediendo, y mucho menos de impedirlo. Es la expresión perfecta de una era de caída libre, en la que muchas personas en posiciones de autoridad parecen estar dirigiendo estafas abiertamente, mientras que aquellos encargados de proteger a la sociedad o bien participan en el engaño o son víctimas de él.
En 2025, todo es inspectores de billeteras.