ADVERTISEMENT

| Work Life

Cómo manejar la frustración en el trabajo de manera más efectiva

¿Te sientes frustrado por todo en el trabajo últimamente? Aquí te mostramos cómo manejar mejor esta emoción común en el ámbito laboral.

Cómo manejar la frustración en el trabajo de manera más efectiva [Foto: VK Studio/Adobe Stock]

La frustración es una emoción común. Es una pariente cercana de la ira, ya que ambas surgen como respuesta a un obstáculo que impide alcanzar tus objetivos. La diferencia radica en que la ira suele dirigirse hacia un obstáculo externo y la energía que genera puede ser útil para intentar cambiar esa situación.

Por otro lado, la frustración suele dirigirse hacia un obstáculo interno o sistémico sobre el que tienes poco control. Puede surgir porque no cuentas con la capacidad o el tiempo para hacer algo, o porque sientes que algún aspecto de tu empresa (o de la sociedad) te impide alcanzar una meta.

El problema con la frustración es que suele ser poco productiva, ya que te enfoca en algo que quizá no puedas solucionar. Además, cuando te dejas llevar por ella, tu capacidad de pensar con claridad disminuye, lo que dificulta aún más encontrar soluciones. Aquí te compartimos algunas estrategias para manejarla de manera efectiva, especialmente en el entorno laboral.

1. Date un respiro

Investigaciones de hace más de un siglo demostraron que existe un punto óptimo de energía mental para funcionar de manera efectiva. Si tienes poca energía, te costará concentrarte. Si te excedes, la sobreexcitación puede dificultar tu enfoque.

Un poco de frustración puede ser útil, ya que te obliga a prestar atención a algo que de otro modo podrías pasar por alto. Sin embargo, cuando la frustración se vuelve extrema es un obstáculo para abordar la situación de manera efectiva.

Es clave desarrollar estrategias para liberar esa energía. Lo ideal es tomar un descanso y desconectarte por un momento. La actividad física puede ayudar: dar un paseo rápido o hacer ejercicio puede calmarte. También pueden ser útiles técnicas de relajación como la respiración profunda, el yoga o la meditación. Algunas de estas técnicas, especialmente la respiración profunda, son útiles incluso cuando no puedes alejarte por completo del problema.

2. Identifica la causa de tu frustración

No siempre es evidente qué está causando tu frustración en el trabajo. Puede que sientas que estás atascado sin saber exactamente por qué. Reflexionar sobre el obstáculo que enfrentas y qué se necesitaría para superarlo puede ser de gran ayuda.

  • ¿Te sientes poco preparado para la tarea que realizas? Tal vez necesites apoyo o capacitación adicional. En ese caso, podrías proponerle a tu supervisor una solución para mejorar tu desempeño.
  • ¿Hay estructuras organizacionales que te dificultan el trabajo? Tal vez dependes de la aprobación de alguien más y no logras obtenerla.
  • Hablar con tu jefe también puede ser útil. Si no estás seguro de dónde proviene la barrera, él o ella podrían ayudarte a identificarla y, en algunos casos, eliminarla. Además, si a ti te afecta, es probable que también esté afectando a otros compañeros.

3. Pide ayuda

La frustración ocasional es parte de la vida laboral y personal. Las estrategias que mencionamos antes pueden ayudarte a gestionarla. Sin embargo, si te sientes frustrado con frecuencia en el trabajo, podría ser útil acudir a un terapeuta o a un coach de carrera.

Es natural pensar que tu frustración se debe a problemas dentro de la empresa, como una mala gestión o una falta de compatibilidad con tu rol actual. Y puede que sea cierto. Un buen terapeuta o coach puede ayudarte a identificar la raíz del problema.

Sin embargo, también es posible que sin darte cuenta estés contribuyendo a esa sensación de frustración con tus propias reacciones. Quizá interpretas las acciones de los demás como obstáculos cuando en realidad no lo son. Tal vez sobreestimas tus capacidades y te enfrentas a situaciones abrumadoras. O quizá te cuesta decir que no y terminas aceptando más trabajo del que puedes manejar.

Es importante reconocer esto porque cambiar de empleo no siempre es la solución. Si tus propias actitudes están alimentando tu frustración, es probable que el problema persista sin importar dónde trabajes.

Al final, manejar la frustración en el trabajo de forma efectiva implica una combinación de autoconocimiento, estrategias para regular tu energía y la disposición de buscar ayuda cuando sea necesario.

Author

  • Art Markman

    PhD, es profesor de Psicología, Dimensiones Humanas de las Organizaciones y Marketing, así como Vicerrector de Asuntos Académicos en la Universidad de Texas en Austin. Art es el autor de Smart Thinking, Habits of Leadership, Smart Change, Brain Briefs y, más recientemente, Bring Your Brain to Work.

    View all posts

Author

  • Art Markman

    PhD, es profesor de Psicología, Dimensiones Humanas de las Organizaciones y Marketing, así como Vicerrector de Asuntos Académicos en la Universidad de Texas en Austin. Art es el autor de Smart Thinking, Habits of Leadership, Smart Change, Brain Briefs y, más recientemente, Bring Your Brain to Work.

    View all posts

Sobre el autor

PhD, es profesor de Psicología, Dimensiones Humanas de las Organizaciones y Marketing, así como Vicerrector de Asuntos Académicos en la Universidad de Texas en Austin. Art es el autor de Smart Thinking, Habits of Leadership, Smart Change, Brain Briefs y, más recientemente, Bring Your Brain to Work.

ADVERTISEMENT

ADVERTISEMENT