La gente puede ser interrumpida hasta 275 veces al día en el trabajo: informe

Aunque el movimiento por el derecho a la desconexión cobró impulso, para muchos empleados todavía es difícil lograr un verdadero equilibrio entre la vida laboral y personal. Responder correos electrónicos y otros mensajes relacionados todavía es la norma en los lugares de trabajo, a pesar de la amplia evidencia de que puede contribuir al agotamiento y, de hecho, reducir la productividad.

Parte del problema puede residir en que la jornada laboral promedio se ve marcada por un número creciente de pérdidas de productividad. Un nuevo informe de Microsoft, que recopiló información de 31,000 trabajadores en más de 30 países, arroja luz sobre la magnitud de las interrupciones y los obstáculos que enfrentan actualmente los trabajadores en el trabajo, así como el grado en que la jornada laboral promedio se ha extendido más allá del horario laboral tradicional.

El precio de las interrupciones constantes

Si bien 53% de los líderes dicen que desean ver un aumento en la productividad, la gran mayoría de empleados y gerentes (alrededor del 80% de los trabajadores a nivel mundial) afirman que no tienen el tiempo ni la energía para hacer su trabajo de manera efectiva.

Los empleados afirman sufrir interrupciones casi constantes durante la jornada laboral, lidiando con correos electrónicos, reuniones o mensajes en tiempo real cada dos minutos. Esto puede suponer un total de 275 interrupciones diarias, considerando el tiempo adicional que los empleados dedican al trabajo fuera del horario laboral habitual.

De hecho, el informe también captura un marcado aumento en la cantidad de pings que reciben los trabajadores fuera del horario laboral: los chats fuera del horario de 9 a 5 aumentaron un 15% año tras año, lo que arrojó un promedio de 58 mensajes cuando se contabilizaron en el transcurso de cuatro semanas.

Una jornada laboral en expansión

Incluso las reuniones parecen celebrarse las 24 horas del día, según el informe, en parte porque muchas empresas ahora emplean a personas que trabajan en diferentes zonas horarias. Las reuniones que tienen lugar después de las 8 p. m. aumentaron un 16% interanual y el 30% de las reuniones involucran a empleados en diferentes zonas horarias.

Parte de este cambio también podría deberse al hecho de que la mayoría de las reuniones (60 %) no están programadas y se convocan de forma improvisada. Cabe destacar también que el número de ediciones de PowerPoint aumenta un 122% en los 10 minutos previos a una reunión, un marcado contraste con la actividad de PowerPoint en las horas previas.

¿Qué podría reducir el agotamiento?

Todo esto apunta a una desconexión más amplia entre las necesidades comerciales de muchas empresas y lo que su plantilla puede gestionar razonablemente, una tensión que tanto empleados como directivos parecen estar sintiendo. Según los resultados de Microsoft, 48% de los empleados y 52% de los directivos afirman que su carga de trabajo es caótica y fragmentada.

El informe justifica por qué las empresas necesitan usar agentes de IA para reducir la brecha y casi la mitad de los líderes ya declararon que usar la “mano de obra digital” para ampliar las capacidades existentes de su fuerza laboral es una prioridad absoluta para los próximos 18 meses. Sin embargo, la IA por sí sola no aliviará las numerosas dificultades del trabajo moderno para empleados o gerentes y ciertamente no acabará con las reuniones superfluas de la noche a la mañana.