Las organizaciones no tienen que celebrar a los disruptores individuales. En su lugar, deberían cultivar ecosistemas donde todo tipo de innovadores puedan prosperar juntos.
El 60% de la Generación Z dijo que la IA les ayuda a ser más productivos en el trabajo, pero el 40% de los hombres dicen que han hecho pasar el trabajo generado por IA como propio.
Los investigadores descubrieron que ser testigo de un mal comportamiento en el trabajo puede tener un impacto sorprendentemente fuerte en las personas.