Las dinámicas en el trabajo están cambiando en los últimos años, en gran parte gracias a la incursión de la nueva generación al mercado laboral. Ciertas prácticas corporativas que algunos millennials y Gen X consideraban normal, ahora son cuestionadas por los centennials que están viviendo su primer trabajo.
Si perteneces a la Generación Z, quizá para ti resultan esenciales elementos como la flexibilidad de horarios, los modelos de trabajo híbridos y una cultura corporativa positiva.
Sin embargo, es posible que en tu primer trabajo te encuentres con un ambiente laboral poco colaborativo o incluso hostil. Esto puede deberse a una cultura organizacional poco desarrollada, falta de comunicación efectiva o conflictos internos.
Alma Hernández, psicóloga y experta en Recursos Humanos, explica los efectos de trabajar en un ambiente negativo. “Puede generar estrés, desmotivación y afectar la salud emocional de los jóvenes que están adquiriendo experiencia en un primer trabajo”, dice.
Hernández explica que existen señales que pueden ayudar a alguien sin experiencia a identificar problemas en el ambiente laboral. Si eres un centennial que está en su primer trabajo, plantéate estas preguntas.
10 preguntas para identificar un ambiente laboral tóxico
¿Existe comunicación efectiva? Si la comunicación entre colegas o con los superiores es deficiente, puede generar malentendidos, confusiones y dificultades en la colaboración.
¿Hay conflictos frecuentes? Si observas que todo el tiempo hay conflictos entre compañeros o departamentos, puede ser una señal de un ambiente laboral tenso o poco colaborativo.
¿Falta apoyo o reconocimiento? Si sientes que tu trabajo no es valorado o que no recibes el apoyo necesario para realizar tus tareas, puede ser un indicio de un ambiente laboral poco motivador.
¿Hay competencia tóxica? Si percibes que hay una competencia excesiva entre colegas que afecta negativamente la colaboración y el trabajo en equipo, podría ser una señal de un ambiente laboral poco saludable.
¿Falta equilibrio entre trabajo y vida personal? Si sientes que tu trabajo afecta negativamente tu vida personal y no hay un equilibrio saludable entre ambas áreas, puede ser indicativo de un ambiente laboral exigente o poco flexible.
¿Tienes mucho estrés? Si observas que muchos empleados están constantemente estresados o abrumados por la carga de trabajo, podría ser una señal de un ambiente laboral poco saludable.
¿Hay una alta rotación de empleados? Esto puede ser indicativo de problemas subyacentes en el ambiente laboral que hacen que las personas se vayan.
¿No hay transparencia? Si la información importante se mantiene oculta o hay una falta de comunicación abierta y honesta en la organización, puede ser una señal de una cultura organizacional problemática.
¿Falta apoyo y mentoría?: En un ambiente negativo, es posible que el joven no reciba el apoyo necesario de sus superiores o no cuente con un mentor que lo guíe en su desarrollo profesional.
¿Predominan los chismes? Participar en chismes, difundir rumores o hablar mal de otros colaboradores puede indicar una actitud negativa y perjudicial.
¿Cómo sobrevivir un ambiente laboral tóxico mientras encuentras una oportunidad mejor?
Según la experta, si identificas alguna de estas señales en tu ambiente laboral, es importante que lo abordes de manera proactiva. “Puedes hablar con tus superiores o con el departamento de recursos humanos para expresar tus inquietudes y buscar soluciones”, recomienda Hwrnández. También, dijo que es importante cuidar tu bienestar emocional y buscar apoyo fuera del trabajo si es necesario.
Enfrentar estos retos puede requerir acciones como establecer límites claros, buscar apoyo emocional fuera del trabajo y, por supuesto, considerar oportunidades laborales en un ambiente más saludable.
Sin embargo, mientras encuentras otra oportunidad laboral, Hernández recomienda algunas estrategias:
Mantén una actitud positiva a pesar de los desafíos, esto puede ayudar a seguir motivado y con una perspectiva adecuada.
Establece límites claros con compañeros tóxicos y situaciones negativas para proteger tu bienestar emocional y mental.
Busca apoyo de compañeros de trabajo de confianza, amigos fuera del trabajo o un mentor que pueda proporcionar un espacio para compartir experiencias y obtener consejos útiles.
Desarrolla la inteligencia emocional y aprende técnicas de manejo del estrés, como la meditación, el ejercicio regular y la gestión del tiempo; de esto puede ayudar a mantener la calma en situaciones difíciles.
Practica la escucha activa y aprende a comunicarte de manera efectiva con tus compañeros de trabajo y superiores; esto ayudará a resolver conflictos y mejorar la colaboración en el equipo.
Aprovecha las oportunidades de desarrollo y no te resistas al aprendizaje. Desarrollar tu carrera profesional te mantendrá enfocado en tus metas a largo plazo y en superar los desafíos actuales.
Evalúa la situación laboral e identifica si es necesario y posible cambiar de área o buscar nuevas oportunidades dentro de la empresa. Si no las hay, busca otro trabajo.