Colombia reforzó este lunes la seguridad en la ciudad de Cali, que albergará la cumbre de biodiversidad COP16 la próxima semana, ante “posibles represalias” de la guerrilla a raíz de operaciones militares en la zona.
El gobierno desplegó decenas de vehículos blindados y 11,000 policías y militares en Cali para “garantizar el desarrollo exitoso” de la COP16, indicó la viceministra de Defensa Daniela Gómez a la prensa local.
El presidente Gustavo Petro aseguró que “la seguridad de la COP16 está garantizada”.
El fin de semana el ejército avanzó con vehículos blindados sobre un bastión del Estado Mayor Central, la mayor disidencia de las FARC, ubicado a unos 130 km de Cali, en el departamento de Cauca (suroeste).
En medio de intensos combates que dejaron al menos una veintena de heridos, los guerrilleros pidieron a las delegaciones internacionales no asistir a la cumbre de Naciones Unidas sobre biodiversidad.
“Con la reciente operación Perseo en el Cañón de Micay se evalúa la posibilidad de represalias por parte de los grupos armados organizados”, indicó la viceministra en entrevista con el diario El Tiempo.
“Para enfrentar esa situación se ha fortalecido la presencia de la fuerza pública”, añadió.
Policías estadounidenses
Tras meses de ataques contra la fuerza pública, los disidentes de las FARC que operan en el suroeste del país habían declarado una tregua para facilitar la realización de la cumbre sobre conservación del medioambiente, a la que asistirán unos 18,000 representantes de unos 200 países, según la policía.
Pero la operación militar en el Cañón de Micay desató una nueva ola de violencia.
El presidente autorizó bombardear a los guerrilleros, en respuesta a un reciente ataque de los rebeldes con explosivos lanzados desde drones que dejó 17 heridos.
El mandatario “supervisa desde el jueves el dispositivo” de seguridad para la COP16, dijo a medios en Cali el general William Salamanca, director de la Policía Nacional.
El alcalde de Cali, Alejandro Eder, anunció este lunes la llegada de una delegación de la policía de Nueva York a la ciudad.
“Nos brindarán asistencia técnica para fortalecer nuestras capacidades en antiterrorismo”, explicó Eder en la red social X.
Banderas y ráfagas
La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, elevó este lunes la bandera azul de la ONU en el Centro de Eventos Valle del Pacífico en Cali, donde se darán cita 14 jefes de estado y más de 100 ministros de ambiente.
“Desde hoy, somos el epicentro de las negociaciones más importantes para la conservación de nuestro planeta”, celebró Muhamad.
Iván Mordisco, principal comandante rebelde de la región, dijo en julio que la COP16 fracasaría aunque el gobierno “militarice con gringos (estadounidenses) la ciudad”.
Mordisco fue apartado en abril de los diálogos de paz que el gobierno adelanta con varias facciones disidentes, luego de incumplir repetidamente los ceses al fuego pactados con la fuerza pública.
A unos 30 kilómetros de Cali, en el municipio de Corinto, un puesto de policía fue hostigado el domingo por disidentes con ráfagas de fusil, denunció la asociación de pueblos indígenas del departamento de Cauca.
Ataques similares ocurrieron en otros cuatro municipios de Cauca, donde hay grandes cultivos de hoja de coca controlados por los guerrilleros que se apartaron del pacto de paz que desarmó a las FARC en 2017.
El general Salamanca defendió la Operación Perseo y felicitó al ejército por llegar al Cañón de Micay, “donde hace más de 10 años no había presencia de la institucionalidad, y menos de la fuerza pública”.