Cómo superar el rechazo cuando buscas tu primera chamba

Encontrar la primera chamba es un paso emocionante, pero también puede ser desalentador cuando te topas con el rechazo. El mercado laboral actual es competitivo, y es natural enfrentar el rechazo en el proceso de búsqueda. Es importante recordar que el rechazo no es un reflejo de tu valor, sino una parte normal del proceso.

En entrevista con Carolina Rojas, headhunter freelance y experta en atracción de talento, nos compartió cuatro consejos para enfrentar y superar tu primer rechazo.

1. Mantén una perspectiva positiva

Lo primero que Rojas recomienda es hacer una lista de tus habilidades, experiencia y logros. “Recuerda tus éxitos pasados, tanto académicos como personales, y confía en tu capacidad para aprender y adaptarte a nuevos desafíos”, dice. 

Imagina cómo sería tu primer empleo ideal. Visualízate realizando las tareas con éxito y satisfaciendo a tus empleadores. Mantén una actitud positiva y entusiasta durante la búsqueda de empleo. 

“Busca el apoyo de amigos, familiares y mentores que te animen y motiven”, recomienda Rojas. Únete a grupos de apoyo en línea para conectar con otras personas que están buscando empleo. Evita a las personas negativas que puedan desanimarte.

“Es normal sentirte frustrado o desanimado por el rechazo en tu primera chamba. Habla contigo mismo con amabilidad y comprensión. Recuerda que eres valioso y que mereces encontrar un empleo que te haga feliz”, dice.

2. Aprende de cada experiencia

Después de cada entrevista o solicitud de empleo, tómate un tiempo para reflexionar sobre tu desempeño. “¿Qué salió bien? ¿Qué podrías haber hecho mejor? Identifica áreas donde puedes mejorar tu currículum, carta de presentación o habilidades para la entrevista”, recomienda Rojas.

Para obtener retroalimentación, pide comentarios a amigos, familiares o profesionales de confianza. “Pregúntales sobre tu impresión general, tu lenguaje corporal y tus respuestas a las preguntas”, dice y agrega que es esencial ser receptivo a la crítica constructiva y úsala para mejorar tu enfoque.

Con base en lo que aprendiste, actualiza tu currículum y carta de presentación para resaltar tus habilidades y experiencia más relevantes. Adapta tu currículum y carta de presentación a cada puesto específico al que te postules.

Otra recomendación es practicar; ensaya cómo respondes preguntas comunes de entrevistas. “Pide a un amigo o familiar que te haga una entrevista simulada. Graba tus respuestas para poder escucharlas y mejorarlas”, dice Rojas.

Por último, registra las empresas a las que has aplicado, la fecha de solicitud y el estado de tu solicitud. “Esto te ayudará a realizar un seguimiento de tu progreso y a identificar las áreas en las que necesitas mejorar”, explica la experta.

3. Sé persistente

Es normal enfrentar el rechazo en la búsqueda de la primera chamba. No te desanimes por las experiencias negativas; úsalas como una oportunidad para aprender y mejorar. Mantén una actitud positiva y enfócate en tu objetivo de encontrar un empleo.

“No te rindas”, dice Rojas. “Sigue aplicando a puestos de trabajo que te interesen. Cuanto más apliques, más posibilidades tendrás de encontrar un empleo que se ajuste a tus necesidades”, agrega.

Habla con amigos, familiares, ex compañeros de clase y conocidos para que te informen sobre posibles oportunidades de empleo. Asiste a eventos de networking, y participa en actividades que te permitan conocer gente nueva y ampliar tu red de contactos.

Par Rojas, la actividad en línea es fundamental. “Utiliza las redes sociales como LinkedIn para conectarte con empresas y profesionales de tu sector”, recomienda. “Sigue a las empresas que te interesan y busca oportunidades de empleo en sus páginas web”, agrega.

No te limites a un solo tipo de empleo; es importante considerar diferentes opciones, como trabajos temporales, freelance o prácticas. “Estar abierto a diferentes opciones te dará más posibilidades de encontrar un empleo”, explica Rojas.

La persistencia es clave para encontrar un empleo. Mantén una actitud positiva y no te rindas, con esfuerzo y dedicación, podrás encontrar el primer empleo que deseas.

4. Cuida tu bienestar

El estrés es una respuesta natural al proceso de búsqueda de empleo. Es importante encontrar maneras saludables de manejarlo, como ejercicio, meditación o yoga. También puedes hablar con amigos, familiares o un profesional de la salud mental sobre cómo te sientes.

“Dormir lo suficiente es esencial para tu salud física y mental”, dice Rojas. Una buena noche de sueño te ayudará a estar más alerta, concentrado y motivado.

Comer una dieta saludable te proporcionará la energía y los nutrientes que necesitas para afrontar la búsqueda de empleo. Evita los alimentos procesados y azúcares añadidos.

Además, el ejercicio regular es una excelente manera de reducir el estrés después de cualquier experiencia de rechazo para buscar la primera chamba. Intenta hacer al menos 30 minutos de ejercicio moderado la mayoría de los días de la semana.

Rojas explica que el proceso de búsqueda de empleo es agotador, tanto física, como mentalmente. “Es importante dedicar tiempo a actividades que disfrutes y que te hagan sentir bien. Esto te ayudará a relajarte, desestresarte y mantener una actitud positiva”, explica.

Esta nota es parte de la serie “Mi Primera Chamba”, que busca exponer lo bueno, lo malo y lo feo de ingresar al mundo laboral.