Creo que mi jefe está agotado. ¿Cómo le ayudo?

Es difícil para los jefes, especialmente para los mandos intermedios, que suelen estar en una posición complicada y se ven obligados a implementar políticas que no agradan a nadie y que, además, no fueron decisiones que ellos tomaron. No es responsabilidad directa de los mandos intermedios resolver los problemas de su jefe directo (y, si no ocupan un puesto de liderazgo, tampoco cuentan con la autoridad para hacerlo). Sin embargo, el jefe establece el tono para todo el equipo, y si está agotado, es probable que ese desgaste se refleje en su equipo, que terminará siguiendo su ejemplo

Puede parecer injusto, pero reflexionar un poco sobre esta pregunta mejorará mucho tu vida (y la de tus compañeros). Esta es una excelente oportunidad para practicar tus habilidades de gestión “ascendente” (o mejor dicho, cómo ayudar a tu jefe en temporadas difíciles). Tomas Chamorro-Premuzic, colaborador de Fast Company, describió varias señales de que tu jefe podría estar sufriendo agotamiento y cómo abordarlas. Aquí te damos algunas ideas.

Parece que no le importa lo que hace su equipo

Chamorro-Premuzic dice que un jefe agotado puede comenzar a ser menos abierto a la retroalimentación, de repente pierde el interés por la moral del equipo o dejade ser receptivo a las preocupaciones.

Si tu jefe se comporta así, puedes normalizar los descansos cortos y las reuniones ocasionales con el equipo, donde hay más oportunidades para interacciones informales. Chamorro-Premuzic también dice que puedes brindarle apoyo de maneras sutiles, como ofrecer ayuda con las tareas o expresar tu agradecimiento por su trabajo.

Ser gerente puede resultar ingrato. Si tu gerente siente que nadie se preocupa por él o que nadie se fija en su trabajo, es menos probable que te ofrezca a ti y a tus compañeros el mismo reconocimiento. Si le demuestras que te importa, con suerte ese cariño se transmitirá a sus subordinados.

Parece que su energía está repartida en todos lados

Estudios científicos sobre el síndrome de burnout demuestran que la energía y la motivación pueden bajar cuando alguien se enfrenta a estrés crónico. Esto podría verse reflejado en tu jefe, quien algunos días te microgestiona, preocupado por cómo tu trabajo influye en su imagen, y otros te ignora por completo, abrumado por su propia carga laboral.

Si tu jefe se comporta así, Chamorro-Premuzic aconseja ayudarlo brindándole estructura y consistencia en tu trabajo para que sepa qué esperar. Establece rutinas como actualizaciones periódicas de proyectos o resúmenes semanales, y sugiérele maneras de delegar para que su carga de trabajo esté mejor distribuida. (Extra: Asume tareas superiores a tu nivel podría ayudarte a obtener un futuro ascenso).

¿Trabaja horas extra y no tiene límites?  

Si tu jefe envía correos electrónicos a altas horas de la noche, trabaja los fines de semana y no se toma tiempo libre, todas estas son señales bastante claras de que no tiene límites para separar vida personal y vida laboral y puede estar agotado.

Si tu jefe se comporta así, probablemente te resulte difícil contradecirlo, pero es otra forma de dar ejemplo estableciendo límites claros. También puedes recordarle con delicadeza que tú y tus compañeros pueden encargarse de sus tareas cuando no se encuentre en persona. (En otras palabras: el mundo no se derrumbará si se toma unas vacaciones y podría ayudarle a reponerse).

Sí, la satisfacción laboral de tu jefe no es tu responsabilidad explícita, pero si de verdad queremos trabajar en un entorno más humano, significa que debemos preocuparnos por el bienestar de todos, sin importar su posición en el organigrama