
Los grandes fabricantes de modelos de lenguaje siguen invirtiendo para hacer realidad las ambiciosas ambiciones de sus sistemas. Pero una empresa ya está cosechando los frutos. Nvidia contribuyó al impulso de la carrera de la IA con unidades de procesamiento gráfico (GPU) que dominan el mercado y, según un análisis del tercer trimestre de 2024 de IDC, ha alcanzado una cuota de mercado del 93% de las GPU que ejecutan cargas de trabajo de IA a nivel mundial. Muchos analistas creen que podría seguir creciendo.
El innovador procesador Blackwell de Nvidia, lanzado en marzo pasado, es hasta 2.5 veces más potente que su predecesor, el H100, y requiere mucha menos energía, según Shar Narasimhan, director de producto de Nvidia para IA y GPU para centros de datos. Según informes, los mayores operadores de centros de datos y laboratorios de IA, como Google, Meta, Microsoft, OpenAI, Tesla y xAI, están comprando decenas de miles de GPU Blackwell.
Mientras tanto, el software y las redes de Nvidia se esfuerzan por obtener la máxima velocidad y potencia de procesamiento de los chips. “Contamos con una plataforma que puede leer eficazmente un modelo de IA, comprender qué necesita hacer y luego distribuir todos estos cálculos entre miles y miles de GPU”, afirma Narasimhan. “Así, se obtiene toda esta comunicación interna, que luego se fusiona y ofrece una única respuesta”.
Si bien DeepSeek y Alibaba han avanzado mucho en el entrenamiento de IA de vanguardia con GPU de Nvidia menos potentes, la compañía no se limita a producir procesadores. En cambio, desarrolla activamente plataformas para todo, desde el descubrimiento de fármacos (Clara para Biopharma) hasta vehículos autónomos (Drive AGX), producción de video (Holoscan) y gemelos digitales (Omniverse). Al impulsar el progreso de la IA en una gama cada vez mayor de escenarios reales y necesidades computacionales, Nvidia se ha posicionado para el crecimiento.