¿Quién quiere visitar Estados Unidos? En 2025, más turistas prefieren gastar su dinero en otros países

Entre los reportes de viajeros arrestados o acosados en cruces fronterizos y los boicots derivados de la retórica divisiva del presidente Trump, no es sorpresa que el número de visitantes internacionales a Estados Unidos haya sufrido una fuerte caída.

Ahora, una nueva investigación de Tourism Economics predice una disminución de 8.5% en el turismo internacional hacia Estados Unidos este año.

Como resultado, el país podría registrar una pérdida de 8,500 millones de dólares en gasto de visitantes internacionales, según Tourism Economics, una compañía de Oxford Economics. Mientras tanto, el Consejo Mundial de Viajes y Turismo tiene una predicción aún más pesimista, estimando una pérdida de 12,500 millones de dólares para 2025.

Las proyecciones actuales son una mejora con respecto a un informe de hace dos meses, que situaba la caída en llegadas en 9.4% y el gasto en 5%, frente al 4.7% actual. Sin embargo, siguen siendo alarmantes si se considera que los investigadores habían pronosticado originalmente un aumento de 9% en viajeros internacionales y un incremento de 16% en su gasto para 2025.

Efectos de sentimiento negativo

La mayor disminución proyectada para un solo país es de 20.2% desde Canadá, la nación independiente que el presidente Trump ha sugerido que debería convertirse en el estado número 51. Europa Occidental le sigue con una disminución esperada de 5.8% en visitantes a Estados Unidos.

Canadá y Europa ya presentan una caída significativa en vuelos reservados de mayo a julio, con descensos de 33% y 10.4%, respectivamente.

“En general, la relación tensa entre Estados Unidos y sus principales aliados comerciales y mercados emisores de turismo seguirá afectando fuertemente la demanda de viajes”, declaró Aran Ryan, autor del informe y director de estudios de industria. “Estos efectos de sentimiento negativo, referidos en nuestra investigación previa, explican nuestra visión de que la retórica y las políticas del gobierno de Trump han contribuido a una mezcla de rechazo de los viajeros y preocupaciones sobre visitar Estados Unidos”.