Cómo cree Bill Gates que se debería utilizar la IA

Las marcas que no utilicen Inteligencia Artificial (IA) pronto se quedarán atrás, pero no es demasiado tarde para empezar, sostiene un nuevo libro con una entrevista a Bill Gates, AI First: The Playbook for a Future-Proof Business or Brand.

De la misma manera que los líderes empresariales exploraron en su momento qué significa priorizar lo digital, lo móvil o el video, los estrategas digitales y autores Adam Brotman y Andy Sack plantean la pregunta: ¿Qué significa priorizar la IA? Brotman y Sack, cofundadores de la consultora digital Forum3, entrevistaron para su libro a algunos de los líderes tecnológicos más influyentes, entre ellos Sam Altman, CEO de OpenAI; Bill Gates, cofundador de Microsoft; y Reid Hoffman, conocido por cofundar LinkedIn. El libro comparte sus perspectivas y ofrece una guía para empresas sobre cómo integrar la IA.  

Brotman, el ex director digital de Starbucks que dio forma a la exitosa aplicación móvil y al programa de fidelización de la marca, habló con Fast Company sobre lo que espera que los lectores obtengan de su nuevo libro:

¿Por qué tú y Sack quisieron escribir este libro en particular, y por qué ahora?  

De hecho, Harvard Business Review Press nos había pedido que escribiéramos un libro sobre fidelización digital, que es mi formación y nuestra especialidad. Pero, como muchos otros, acabamos de tener un momento de sorpresa cuando vimos ChatGPT. No entendíamos qué había realmente detrás de estos sistemas de IA generativa ni hacia dónde se dirigían los diversos laboratorios y sistemas de vanguardia. Pensamos: “Más vale que aprendamos esto”. Le preguntamos a Harvard si podíamos emprender este viaje y compartirlo con nuestros lectores, y dijeron que sí.   

¿Por qué sientes que la IA es diferente a otros avances tecnológicos? 

Hay dos maneras. Una es que hablamos de inteligencia como servicio, y eso parecía algo reservado para la ciencia ficción o para los seres humanos. No se trataba solo de software que se programaba, que funcionaba o no. El hecho de que pudiera pensar y razonar —al menos en apariencia— resultaba muy humano y diferente a lo que habíamos visto. La segunda era su velocidad de movimiento.  

Mencionaste el “momento de mierda”. He oído que tú y Sack en algún momento quisieron que ese fuera el título del libro. ¿Por qué?

Hablamos con Sam Altman en nuestra primera entrevista para el libro. Dijo que la misión de OpenAI era lograr la IA general. Y, por definición, es cuando la IA puede hacer efectivamente lo que cualquier humano puede hacer, si no mejor, prácticamente al instante y gratis. Pensamos: “¡Dios mío! Están centrados en eso. ¿Cuándo creen que sucederá?”. Y él dijo: “No puedo predecirlo, pero probablemente en unos cinco años”. Fue un momento de revelación para nosotros. Nos quedamos un poco atónitos. Cuando pruebas esta tecnología, creo que todos tenemos nuestro momento revelador, por así decirlo. ¿Cómo la aprovecho? ¿Qué significará para el empleo? ¿Qué significará para la sociedad?

Hay muchas cosas emocionantes, pero también muchas incógnitas aterradoras. Pensamos que era un nombre apropiado, pero, por supuesto, no es el mejor nombre para un libro publicado por una editorial consolidada. Así que llegamos a un acuerdo y titulamos la introducción “El momento de revelación”, y el libro se titula AI First.  

También entrevistaste a Bill Gates. ¿Podrías contarme cuál fue el mayor aprendizaje de tu conversación con él?

Sí, de la entrevista con Bill Gates aprendí dos cosas: Una fue que comparó la primera vez que vio ChatGPT4 con la primera vez que vio una interfaz gráfica de usuario, antes de que Microsoft apareciera y liderara la revolución de las PC con Windows. Así que validó y confirmó la importancia de esta tecnología. La otra conclusión clave que Bill Gates nos dijo fue sobre los límites del concepto de productividad. La mayoría de nosotros pensamos en la productividad como algo meramente cuantitativo, es decir, en resultados. Nos recordó que la productividad tiene una dimensión cualitativa, y que si tienes acceso a una herramienta como la IA generativa y sabes cómo aprovecharla, no solo aumentarás tu productividad, sino también la calidad de tu trabajo. Me pareció muy interesante. 

¿Cómo deberían hoy los líderes empresariales aprovechar la IA?  

La mayoría de las organizaciones quieren pasar directamente a la innovación en IA. Quieren pasar directamente a la aplicación, como el chatbot o el robot. Lo que pasan por alto son los poderosos efectos del uso diario de la IA para mejorar la toma de decisiones, el análisis y la comprensión; francamente, para trabajar mejor y más rápido. Esto no es tan atractivo como la tecnología avanzada de voz para autoservicio que se implementa en todos los restaurantes de comida rápida. No es tan atractivo como innovar por completo la producción creativa mediante funciones de texto a imagen y texto a video.

Estos son casos de uso de IA realmente importantes, pero no son la superpotencia cotidiana y permanente de permitir que cada individuo se beneficie de la inteligencia para tomar decisiones más rápido. Una de las claves del libro es que las organizaciones que priorizan la IA empiezan con personas que priorizan la IA.   

¿Es eso lo que quieres decir cuando dices que los dueños de negocios deberían pensar en la IA como un colega?  

Sí. Se trata de colaborar, de conectar con la IA, de invitarla a la mesa, como le gusta decir a Ethan Mollick —experto en IA y profesor de Wharton—. Se trata de considerarla un miembro del equipo, un colega.  

¿Hay algo más que quieras que los lectores sepan sobre tu libro o la IA en general?  

Creo que muchas personas se sienten intimidadas o temerosas de no poder mantenerse al día con los avances en IA o de sus implicaciones, dada su rápida evolución y potencia. Lo que yo diría es: aún estamos a tiempo. Hay muchísimos líderes empresariales en la misma situación que tú. Este es el momento perfecto para desarrollar un plan de acción y determinar cómo lograr que tu organización se mantenga al día con lo que sucede. Pero no esperes, ¡empieza ya!