Manejé la nueva Lynk & Co 900 y esperar su llegada a México valdrá la pena

Bajo el paraguas de la marca hermana dedicada a autos de lujo Zeekr, Lynk & Co llegó a México con los modelos 08 y 09, dos SUVs híbridas eléctricas enchufables (o PHEV) premium que buscan redefinir la movilidad en el país. Pero estas dos camionetas son solo el preámbulo de la siguiente SUV de gran tamaño de la marca y nueva flagship, la Lynk & Co 900.

A pesar de su gran tamaño (5.24 metros de largo, 1.99 de ancho y una altura de 1.81 metros), la camioneta promete un consumo de combustible promedio de apenas 0.65 litros por cada 100 kilómetros y una autonomía combinada de 1,443 kilómetros. Además tendrá una carga de 60% en solo 17 minutos, gracias a su batería CC de carga rápida, un regalo en un país donde encontrar puestos de recarga aún es complicado. Esto sumado a un diseño que aprovecha el interior del vehículo, explota la tecnología de la plataforma Nvidia Thor SoC y busca ser moderno, acogedor y seguro para los seis pasajeros.

Por su puesto que tenía que probar el poder de esta bestia.

Una extensión de las piernas

Como dijo el teórico de la comunicación, Marshall McLuhan en su libro Understanding Media: The Extensions of Man, los medios y tecnologías son, fundamentalmente, extensiones de alguna facultad física o sensorial humana. Tal vez no se refería propiamente a una SUV de gran tamaño, pero la Lynk & Co 900 podría ser una gran referencia para su aseveración.

Como una conductora de sedanes y hatchbacks, me sentí intimidada la primera vez que subí a este camionetón. Pero la sensación se disipó al momento de abrir la puerta y el estribo retráctil se desplegó para subir sin brincar a la 900. Desde ese punto, la sensación no paró de mejorar.

Cuando me enseñaron a manejar, el primer consejo de mis padres (primeros pasajeros y víctimas) fue probar los frenos al acelerar y detener el vehículo de golpe. Pero en la Lynk & Co 900 tenía la posibilidad de llegar a 100km/h en menos de 5 segundos, y frenar en pocos metros, por lo que era una oportunidad única para probar las capacidades tanto de velocidad como de seguridad que presume la SUV (y que supera con creces).

Aún más sorprendente fue la facilidad de conducción de la camioneta en ciudad que, a pesar de sus medidas y mi experiencia al volante de vehículos grandes, permite manejar en carriles reducidos, dar vueltas con facilidad. Otro detalle importante es la facilidad que la 900 tiene para sortear los obstáculos de cualquier camino mexicano —desde topes y vibradores, hasta baches y coladeras— gracias a sus suspensiones.

La sensación va más allá del manejo. Es como si la máquina y el cerebro se conectaran como uno solo.

Tecnología y lujo

Hoy los autos son más que eso; son computadoras capaces de transportarte. La mejor manera de ejemplificarlo en la Lynk & Co 900 es la plataforma Nvidia Thor SoC, diseñada para asistencia y conducción autónoma, cuyas capacidades incluyen la posibilidad de estacionar sin utilizar tus manos y sin conductor.

Ahora, esta es la primera SUV que me hace repensar ser piloto y no poder disfrutar del resto del espacio. Es decir, si manejas claro que puedes disfrutar del masaje que brindan los seis asientos de la Lynk & Co 900, así como calentarlos o enfriarlos según sea el caso. También, escuchar tu playlist para roadtrips en las 23 bocinas Harmon Kardon (un par de ellas integradas al reposacabezas de los asientos de la primera y la segunda fila) y ver la pantalla táctil 6K de 30 pulgadas que se extiende desde el centro del tablero hasta el lado del pasajero.

Pero no puedes disfrutar de la pantalla trasera retráctil, el sistema de karaoke que tiene integrado, los techos panorámicos y la capacidad de configurar los asientos de la segunda fila en distintas posiciones (90º y 180º), ya sea para descansar o ver directamente a la tercera fila. Lo bueno es que siempre habrá alguien que se compadezca del piloto y le comparta un refresco frío sacado del pequeño frigobar de la camioneta (solo imagino cómo esto cambia el juego para los viajes por carretera en familia).

¡Nos vemos en México!

Para su llegada a México, la Lynk & Co 900 tendrá algunos cambios. Estos incluyen la ausencia del sistema LED exterior personalizable y el sensor LiDAR por regulaciones.

La SUV se lanzó en cinco colores exteriores y tres interiores, aunque aún se desconoce cuáles serán los que llegarán al país. La camioneta tiene tres versiones: 1.5 L dual motor, 2.0 L dual motor y 2.0 L triple motor, aunque tampoco es seguro si todas llegarán.

En realidad, nada radical o que disminuya el confort y tecnología de la SUV. Tal vez lo único que no me gusto de probar la Lynk & Co 900 es que llegará hasta 2026. Y yo la quiero ahorita.