
Nadie puede negar que las redes sociales han estado incendiadas con polémicas alrededor de Emilia Pérez, la película donde participan Karla Sofía Gascón, Zoé Saldaña y Selena Gómez. Fuegos atizados no por su contenido ligado a la dura realidad del narcotráfico en México, sino por las declaraciones de sus propios protagonistas.
Lo que en un principio parecía una campaña de marketing concentrada en hacer de la cinta musical un hito entre los amantes del género, se transformó en una guerra abierta entre Karla Sofía Gascón con usuarios de X por una serie de tuits que escribió la actriz hace años, y por una serie de lamentables declaraciones del director del filme, Jacques Audiard, sobre el idioma en el que está la mayor parte de Emilia Pérez: el español.
Los escándalos cambiaron el foco de la película rumbo al Oscar 2025. Transformó a Gascón en una villana, con un pasado de tuits muy cuestionables, y a Audiard de ser un director vanguardista a uno polémico y con declaraciones incongruentes y fuera de lugar.
¿Pero qué puedes aprender de estos dos meses de dolorosos tropiezos de Emilia Pérez, para no cometer los mismos errores en el marketing digital de tu marca? Te dejo cuatro breves lecciones al respecto.
1. No olvides que las redes sociales no olvidan
Dice el dicho que “siempre hay un tuit”, y es totalmente cierto. Lo bueno y lo malo que hagas en las redes sociales de tu empresa sí tienen repercusión en el futuro. Cualquier enfrentamiento, mal servicio al cliente o fueguito no apagado, podrán ser utilizados en tu contra por tus detractores o tus propias audiencias objetivo, pues estás incumpliendo una promesa tácita que le haces a tus audiencias objetivo desde el primer momento que sales a promocionarte.
Lo que pasó con Karla Sofía Gascón es un ejemplo. De ser admirada por su capacidad histriónica para interpretar a “El Manitas” y Emilia Pérez, pasó a ser atacada por usuarios de redes e ignorada por Netflix, la empresa productora de la cinta, para participar junto al resto del elenco en algunas de las galas más importantes de la temporada de premios de Hollywood.
2. Escribe sobre lo que conoces
Debes conocer bien tu producto y la mejor forma de acercarlo a sus audiencias objetivo. Querer encontrar el hilo negro en algo que no conoces, es realmente un desperdicio de tiempo, pero sobre todo un peligro para la reputación de tu marca en un futuro. Debes conocer tu negocio, pero también el nicho al que pertenece y en el cual te vas a desenvolver, pues todo lo que suceda alrededor puede beneficiarte o perjudicarte de forma directa e indirecta.
Las redes sociales son ese punto de encuentro entre tu marca y sus clientes objetivo; tener un acercamiento adecuado, con un storytelling correcto y planificado, te permitirá no caer en errores de comunicación o de exceso de sinceridad que pueden jugar en contra de tus planes futuros.
En el caso de Emilia Pérez, Jacques Audiard no solo escribió y dirigió una película enfocada en la dura realidad del narcotráfico y la desaparición de personas en México, sin haber puesto un pie en el país o haber palpado de primera mano este flagelo; su auténtico pecado fue haber admitido que sabía un poco sobre el tema central de su película.
3. Siempre estás vendiendo, no lo olvides
Aunque dicen que a las palabras se las lleva el viento, a los tuits o declaraciones no. Todo el tiempo estás vendiendo tu producto o marca en redes sociales, no importa si es a través de canales oficiales o personales, si es a través de un empleado o de sus dueños. Cualquier cosa que se diga podrá ser usada a favor o en contra de tu negocio, siendo un impulso o un auténtico freno en el engagement que se tenga en medios digitales.
Por ejemplo, si tienes una marca de productos de belleza, sería absolutamente incongruente salir a hablar mal de la materia prima que utilizas, de las problemáticas del sector o del peligro de utilizar maquillaje. Es literalmente darte un balazo en un pie, pues, aunque lo hicieras desde tu cuenta personal, esto podría impactar directamente en la forma en que las audiencias objetivo perciben tu negocio y su auténtico valor. Aquí no cuentan las opiniones personales, porque todo está directamente ligado a tu marca.
4. No te ayudes, mon ami
Para la película, la cereza en el pastel de la polémica la puso el mismo Audiard, asegurando en una entrevista que el “el español es una lengua de países emergentes, una lengua de países modestos, de pobres y de migrantes”. Y sí, aunque lo hizo a título personal, se le olvidaron dos cosas. La primera es que en un mundo tan convulso, este aderezo era innecesario para su promoción. Y la segunda (y a mi gusto más importante), 95% de toda su película está precisamente en el idioma que él mismo desdeñó.
Recuerda, cada polémica fuera de tu empresa o marca, es una auténtica oportunidad para aprender lecciones, traducirlas en oportunidades y no caer en errores que pudieron ser evitados o corregidos a tiempo. De todo queda huella digital, así que parte siempre de esa idea.