Ikigai: Cómo adaptar a tu carrera el secreto japonés para una vida larga y feliz

¿Nuevo año, nueva versión profesional de ti? Quizá es momento de hacer tu ikigai.

¿Puedes encontrar ese punto perfecto en el diagrama de Venn que incluye estas cuatro categorías?

• Lo que amas
• En lo que eres bueno
• Lo que el mundo necesita
• Por lo que te pueden pagar

Esta pregunta existencial es presentada por Héctor García y Francesc Miralles en su libro Ikigai: El secreto japonés para una vida larga y feliz. En japonés, ikigai combina las palabras para vida y propósito o valor. El libro también incluye los consejos habituales de comer bien y hacer ejercicio (¡Feliz Año Nuevo para ti también!).

Regresé recientemente de mi primera visita a Japón y estoy fascinada por la belleza natural de su gente y su país, así como por la belleza que crean. De lo que observé, los japoneses ponen una cantidad impresionante de pensamiento en su arquitectura y paisajismo. Planifican meticulosamente dónde y cómo colocar cada elemento para generar la mayor belleza posible. Aprovechan al máximo los beneficios del “paisaje prestado”, es decir, los elementos naturales que los rodean.

HAZ TU IKIGAI TÚ SOLO

¿Puedes hacer esto con tu vida? Casi siete años después de iniciar mi segunda carrera como diplomática convertida en coach de oratoria, sigo despertando cada día agradecida por haber encontrado un trabajo que es significativo y rentable. Es mi punto perfecto en mi ikigai, el secreto japonés para la felicidad.

Al pensar en cómo maximizar la belleza de tu vida en 2025, hazte algunas preguntas significativas. Si las preguntas al inicio de este artículo te resultan difíciles de responder, comienza con algo más sencillo. ¿Qué te han dicho las personas que haces bien? ¿Qué actividades generan los cumplidos más genuinos de los demás?

Mientras reflexionas sobre las respuestas, pregúntate: ¿Cuáles de esas cosas que haces bien disfrutas realmente? ¿Qué actividades te hacen sentir bien contigo mismo al final del día?

Para mí, nada en mi carrera se siente mejor que las notas de agradecimiento de los clientes cuando les ayudo a prepararse para una oportunidad de oratoria pública—ya sea un discurso formal o una reunión importante—de una manera que marca una gran diferencia para ellos.

Encontrar el punto de intersección entre estas preguntas inmediatas y (seamos realistas aquí) la pregunta de qué te pueden pagar por hacer, suele ser un desafío. ¿Puedes probarlo como un proyecto paralelo? Yo probé mi nueva carrera mientras estaba en una licencia familiar no remunerada de mi carrera diplomática. Doné algunas horas de mi tiempo para entrenar a empleados de un grupo de expertos y salí de ahí en las nubes. Cuando decidí cerrar mi etapa diplomática, ese grupo de expertos se convirtió en el primer cliente de mi nuevo negocio.

PLANEA TU CAMINO HACIA ADELANTE

Un ritual que sigo desde hace años, gracias a una recomendación de un programa de desarrollo empresarial, es un retiro semestral conmigo mismo. Cada seis meses, reservo una hora (no es una visita lujosa a un resort, pero funciona) para preguntarme cómo quiero que se vea mi estilo de vida, cómo quiero priorizar las relaciones en mi vida y cómo quiero ganar dinero.

En cada área, reviso lo que escribí hace seis meses. Luego escribo mi análisis actual de lo que quiero y cómo estoy logrando mis objetivos. El último paso es una lista de acciones para cada área. Una vez que termino, imprimo mi lista de acciones (solo una página) y la coloco en mi escritorio donde pueda verla todos los días.

Prueba esto tú mismo. Aparta una hora en tu calendario. No permitas distracciones. Reflexiona sobre cómo puedes aprovechar la “arquitectura natural” de tu vida para maximizar la belleza que puedes crear. ¿En qué eres bueno? ¿Por qué te agradecen las personas? ¿Cuál de estas actividades puede generarte ingresos? Con esta nueva perspectiva, puedes planear cómo utilizar el 2025 para encaminarte hacia tu propio secreto japonés para la felicidad.